La primera semana de septiembre, la Dra. Francisca Castillo sembró un ensayo de trigo en la Estación Experimental Agropecuaria Austral, UACh-Valdivia, con distintos niveles de termotolerancia en campo
La Dra. Francisca Castillo, es investigadora postdoctoral del Instituto Milenio de Biología Integrativa iBio en el Laboratorio de Nutrición y Genómica de Plantas dirigido por el Dr. Javier Canales, y junto a la Dra. Anita Arenas y el Dr. Daniel Calderini, se han planteado el desafío de avanzar en el conocimiento sobre el cultivo de trigo, específicamente sobre los mecanismos que permiten a los cultivos soportar las alzas de temperatura en un contexto de cambio climático. Esto, considerando que los eventos extremos, como las olas de calor, son cada vez más frecuentes y constituyen una seria amenaza a la productividad de cultivos a nivel global.
En ese contexto, la investigadora sembró 14 líneas de trigo la primera semana de septiembre 2020 en la Estación Experimental Agropecuaria Austral, UACh-Valdivia. Las líneas de trigo provienen del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), y se caracteriza por presentar distintos niveles de termotolerancia en campo, que es la capacidad de un cultivo de mantener su productividad en condiciones de estrés por altas temperaturas.
La colaboración con CIMMYT surgió en el “1st International Wheat Congress” que tuvo lugar en Saskatoon, Canadá durante el mes de julio de 2019, al que la investigadora tuvo la oportunidad de asistir. Aquí pudo detectar la oportunidad de complementar los objetivos planteados en su proyecto mediante la exploración de este valioso recurso genético dado por el panel de líneas desarrolladas por el centro. En este experimento preliminar se evaluará la expresión basal de algunos genes candidatos involucrados en procesos de termotolerancia, y se medirá el rendimiento de cosecha que se realizará a fines de enero 2021. En un próximo ensayo, explica la investigadora, se llevarán a cabo tratamientos de choque térmico para evaluar la respuesta fisiológica/molecular de estas líneas de trigo en nuestro ambiente, lo que permitirá complementar los resultados del proyecto.
La Dra. Francisca Castillo recuerda que el trigo es uno de los cereales más consumido en el mundo, “provee alrededor de un 20% de las calorías diarias, y por cada 1°C de aumento por encima de las temperaturas óptimas en etapas clave del desarrollo del cultivo, se generan pérdidas de un 5-6% en la productividad de trigo, por esto su investigación resulta clave para la seguridad alimentaria global”, comentó.
“Lo que estamos estudiando en iBio, es caracterizar la funcionalidad de ciertos genes candidatos en el proceso de termotolerancia mediante una estrategia de genómica funcional a través de la inducción de pérdida y ganancia de función (tanto en trigo como en Arabidopsis thaliana), y explorando la variación que ofrece este panel de líneas de trigo CIMMYT, para aportar al conocimiento y lograr en un futuro obtener cultivos más resilientes al estrés por calor” explicó la investigadora, quien es Bioquímica, y doctora en Ciencias Agrarias.